Mujer de Oficios

Soy la Meli Grob Lea-Plaza, mujer apasionada en todos los aspectos de la vida y sobre todo por enseñar. Mamá de 4 peques, casada, dentista periodoncista. Convencida en que la vida la vamos formando al andar y que su máximo sentido es vivirla contribuyendo y dejando huella. Oriunda de la ciudad de La Unión, luego de chica me vine a vivir a Santiago, estudié en escuela Waldorf donde aprendí a ver la vida desde otro prisma y conectarme con la música (toco piano) y las manualidades. Siempre me gustó enseñar, es algo que me sale innato. Soy dentista, periodoncista, profe de Odontología en la Universidad de los Andes, directora médica del Club de Leones Las Condes, corporación de servicio sin fines de lucro y Fundadora de Mujer de Oficios, un espacio para crear.
Las manualidades siempre han sido mi refugio, mi conexión conmigo misma; me encanta la carpintería, el tallado, la cerámica y el tejido en todas sus derivadas. De chica tejí mucho, y luego al ser mamá, en mis pre y post natales, cuando podía conectarme con mi esencia, espacio en el que surgen estas ganas de crear, de conectar con más mujeres, me permití crear sin límites y decidí fundar Mujer de Oficios. Comencé haciendo clases de tejido XXL, tejido con las manos, cuando me contactó Penélope y Punto para ver si podía hacer clases de tejido. Feliz me uní a ellas y comenzamos con las “knitting party”, armándose grupos de al menos 5 alumnas. Fue así como empecé desde casa, en una dinámica muy rica, dándome cuenta que tenía el espacio que estaba buscando para desarrollar mis clases y viviendo esa experiencia, nace Mujer de Oficios: M de Mujer, M de Mamá, M de Manualidades, M de Melisa y M de Multifacética. Cuando llegó la pandemia le hice unos ositos tejidos a crochet a mis hijos y ellos los amaron. Esa reacción con sus ositos tejidos a crochet fue tan especial, que necesité compartirla y así fue como con mis alumnas del momento, tejimos 16 ositos para los hijos de los señores recolectores de la basura. El cariño fue tanto, que se adhirieron muchas embajadoras voluntarias de distintos puntos del país y así fue como el 2021 llegamos a juntar 460 ositos y ya el 2022 recolectamos 1.200 ositos. Esta campaña lleva el nombre de #tejeunositosolidario y no sería posible si no fuera por todas las manos generosas, que - de Antofagasta a Punta Arenas -, tejen el mismo patrón de Mujer de Oficios y que cada una de las embajadoras hace el seguimiento y motiva a que seamos cada vez más los motivados por esta gran causa: regalar alegría a los niños más necesitados. Los ositos los regalamos a niños vulnerables de ollas comunes, hospitales, escuelitas rurales, fundaciones y campamentos entre otras. Nuestra meta es descentralizar la campaña y que los ositos puedan ser entregados en cada región de Chile, siguiendo el mismo estándar de organización y compromiso que hemos mantenido hasta la fecha. Actualmente mantengo mi grupo de alumnas adultas de tejido libre presencial y desde el 2020 que doy talleres online de amigurumi y crochet en general. De a poco y quizás al ir dándome cuenta que le he ido enseñando a nuestros hijos, es que me he ido enfocando mucho en enseñar a tejer crochet a niñ@s, me encanta ver cómo uno puede entregarles tanto al enseñarles el arte de tejer. En mi tiempo libre, que es escaso, me encanta hacer deporte, tener mis salidas exclusivas con cada uno de mis hijos a solas y mi día de pololeo con mi marido, que no lo transo por nada.

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